Si no es el caso, permíteme presentarme. Mi nombre es Brayan Arias y nací en la ciudad de Popayán. Desde muy pequeño me incliné por ciertos conocimientos que a otras personas simplemente no interesaban.
Uno de los primeros libros que leí tenía que ver con autosugestión e hipnosis y empecé a hacer prácticas con algunos de mis amigos divirtiéndoles en el proceso.
Decidí estudiar ingeniería electrónica profundizando en biomédica, telecomunicaciones y nanotecnología, agregando una opción en administración para desarrollar habilidades de emprendimiento. Luego, seguí con una maestría en ingeniería electrónica y de computadores haciendo énfasis en neurociencias investigando con potenciales evocados.
Creé un par de empresas y perdí mucho dinero en el proceso. La academia me comenzó a llamar con más fuerza. Entré a enseñar a la universidad investigación cuantitativa, equipos biomédicos y a dirigir algunos proyectos de investigación. Me incorporé posteriormente a la Universidad de los Andes para dirigir los laboratorios del Departamento de Ingeniería Eléctrica y Electrónica por más de siete (7) años.
Paralelamente hice una especialización en Creatividad, Innovación y Diseño por medios virtuales, con la Arizona State University & la Universidad Nacional Autónoma de México. Esto me permitió entender mucho mejor la educación virtual en su momento, nuestro papel como creadores de experiencias y el desarrollo creativo que cada ser humano debe concientizar. También abrió las puertas a nuevos procesos de innovación.
Posteriormente me formé y certifiqué como coach de transformación personal tanto con Strategic Intervention como con Robbins Madanes Training Center. Uniendo los últimos estudios, formulé proyectos desde el interior de la entidad en la que trabajaba para crear un grupo llamado "Creativos Conscientes" que posteriormente se tradujo a diferentes cursos por Educación Continua.
Me vinculé a varias mesas sectoriales para el desarrollo de la industria desde la academia y logré crear nuevas alianzas para obtener como resultado la primer propuesta "Clúster de Diseño y Desarrollo de Productos Electrónicos", una postulación para un programa de liderazgo, un ascenso en el cargo, entre otros. Pero no tenía cómo saber en ese momento lo que se estaba cocinando en el caldero de polvo estelar para mis futuras misiones de transformación.